REPÓKER DE CAMPEÓN

REPÓKER DE CAMPEÓN
CAMPEÓN DEL MUNDO (18-12-2011)

martes, 16 de agosto de 2011

Ilusionante

El primer clásico de la temporada me deja este titular. Prometo que mi retiro estival no tiene nada que ver y que los 40º a mi vuelta a Sevilla tampoco han derretido mi cerebro. Vi el partido, por supuesto, y he de decir que, por primera vez en mi vida, no me llevé con el pellizco en el estómago desde una semana antes. Aún me dura la empachera de abril, quizás. Poca tensión por el título en juego, también (aunque he de decir que, si ningún año me hace especial ilusión ganar la Supercopa, esta temporada la quiero a toda costa). Lo atípico de estos partidos en esta fecha, posiblemente.

¿Algo está cambiando en mi corazón culé? Negativo. En cuanto Teixeira Vitienes pitó el comienzo, volvió la hooligan que llevo dentro. El gol de Villa lo canté desde el alma blaugrana, aletargada por el lago periodo de descanso y anestesiada por todos los titulares triturados sobre Alexis Sánchez y Cesc Fàbregas. Y el de Messi... Sobran las palabras. Este equipo volvió a dar una lección a quienes pensamos, con lo que había sobre el campo y lo rápido que ellos se adelantaron, que ya no haría falta jugar la vuelta, que había que preparar los aspersores otra vez.

Dijo en la previa Pep Guardiola que sacaría a los que mejor estuvieran para competir. Y la primera conclusión relevante es que en este equipo compiten todos. Mejor o peor, pero no bajan los brazos. De todos es sabido la atípica pretemporada que está viviendo el vestuario: jet lag, calor en USA, jugadores con sus selecciones, Copa América... Por ello, la alineación que puso en liza el de Santpedor puede considerarse "de circunstancias". Sin los centrales titulares (Puyol-Piqué), sin dos de los pesos pesados del centro del campo (Sergio Busquets y Xavi), y con cuatro jugadores que habían realizado cinco entrenamientos desde que volvieron (Messi, Mascherano, Alves y Alexis), con menos rodaje que el rival (a estas alturas, una semana menos se nota)... Y, a pesar de todo, ellos sólo nos empataron. En su casa. Y lo vuelven a vender como una victoria. Por eso no sólo el resultado sino las sensaciones son ilusionantes para mí.

Como también lo fue el debut de Alexis Sánchez. Se fajó en defensa como un jabato, presionó, dribló, tiró paredes... con cinco entrenamientos. Por momentos, parecía que había nacido en Rosario y había jugado con Messi toda la vida. No sé si el chileno alcanzará una buena cifra de goles (sobre todo teniendo en cuenta que luce el "maldito" 9), pero a mí ya me tiene encandilada su entrega. Y su carácter. Era su primer clásico y no se amilanó. Ni el ambiente ni los galácticos lo intimidaron.

Por lo demás, es cierto que ellos jugaron mejor durante los primeros veinte minutos. Lo que les duró el fuelle, hasta que consiguieron el primer tanto, obra de Özil. Es muy difícil mantener ese nivel contra el Barça, y menos en pretemporada. A partir de entonces, la historia de siempre: patadas a destiempo; entradas criminales (la central lechera puso el grito en el cielo por la falta de De Jong a Alonso durante la final del Mundial de Sudáfrica, pero apenas ha pasado de puntillas sobre la AGRESIÓN de Khedira a Abidal, juego brusco grave, digno cuando menos de roja... Y no vio ni amarilla); Pepe campando a sus anchas con la complicidad arbitral; Mou quejándose en la banda por todo... Lo importante, visto lo visto, además del magnífico resultado para la vuelta, fue que todos nuestros jugadores acabaron enteros.

Un apunte más: Xavi Hernández, que no acudió a la convocatoria de Del Bosque por lesión, empezó en el banquillo, al igual que Piqué, que pidió el cambio antes del descanso del partido de La Roja; Sergio Busquets, ni jugó. Sergio Ramos, en cambio, estaba fenómeno de su lumbalgia y no sólo fue titular, sino que jugó los noventa minutos. Si hubiera sido al revés, la habríamos tenido montada. No hase falta desir nada más.

El miércoles, la vuelta. Me quedan varias incógnitas. La primera, el planteamiento de Mou en el Camp Nou: dudo que salga como en la ida. La segunda, el arbitraje: ¿se atreverá el trencilla, en caso necesario, a expulsar a alguien, sabiendo la que le va a caer después? La tercera, la alineación de Pep: con casi todos disponibles en teoría, más Cesc, bendito problema para confeccionar la medular azulgrana, auténtica esencia de este equipo. Afortunadamente, sólo habrá que esperar unas horas para comprobarlo. Ya es martes y este artículo es como el próximo clásico: lo empecé un día y lo acabé otro.

1-0: Özil: http://www.cope.es/tiempo-de-juego/audio-gol-de-ozil--real-madrid-1-bar-a-0-120167

1-1: Villa: http://www.cope.es/tiempo-de-juego/audio-gol-de-villa--real-madrid-1-bar-a-1-120168

1-2: Messi: http://www.cope.es/tiempo-de-juego/audio-gol-de-messi--real-madrid-1-bar-a-2-120169

2-2: Alonso: http://www.cope.es/tiempo-de-juego/audio-gol-de-xabi-alonso--real-madrid-2-bar-a-2-120171

No hay comentarios:

Publicar un comentario